La revisión táctica de Flick: el Barça busca intensidad y cohesión tras las recientes derrotas

Tras la arrolladora derrota del PSG y la sorpresa del Sevilla, el FC Barcelona se enfrenta actualmente a una crisis de confianza. Hansi Flick contempla cambios significativos, incluyendo un reposicionamiento ofensivo sin precedentes para recuperar la intensidad que definió a su equipo la temporada pasada.

Las derrotas consecutivas contra el Paris Saint-Germain (1-2) y el Sevilla FC (1-4) han dejado una profunda huella en el vestuario catalán. El Barcelona, ​​superado por los parisinos y superado en velocidad por los andaluces, parece haber perdido parte de su identidad colectiva. Hansi Flick, conocido por su disciplina táctica, ha respondido con rapidez. El técnico alemán y su cuerpo técnico han analizado a fondo ambas derrotas y han llegado a una conclusión clara: la presión desde la delantera ya no satisface las exigencias de su estilo de juego.

Para solucionar esto, Flick está considerando un ajuste radical, según informes. Planea reposicionar a Marcus Rashford como delantero centro. Fichado por su velocidad y dinamismo, el internacional inglés podría convertirse en el delantero titular del Barcelona tras el parón internacional. Esta decisión probablemente relegaría a Robert Lewandowski a un rol más limitado, posiblemente como suplente de impacto, mientras que Ferran Torres ya ha sido probado en esta posición y ha causado una buena impresión.

Flick busca revitalizar la intensidad y la cohesión del Barcelona.

Más allá de simplemente reposicionar a Rashford, Hansi Flick busca reafirmar los principios que impulsaron al FC Barcelona al éxito la temporada pasada: presión coordinada, una línea defensiva alta y transiciones rápidas. El técnico alemán cree que la falta de presión colectiva desde la delantera ha debilitado toda la estructura defensiva, restando eficacia a su trampa del fuera de juego.

El objetivo es claro: revitalizar un equipo capaz de asfixiar a sus rivales manteniendo el control del balón. Flick ha recordado a sus jugadores que la disciplina y la unidad fueron clave para el triplete del año pasado. El mensaje es claro: el parón internacional debería servir de reinicio para el Barcelona, ​​permitiéndole recuperar su estatus de potencia colectiva que una vez infundió miedo en toda Europa.